Hay una razón definitiva por la cual Nosotros nunca
comemos carne y por qué los seres humanos tampoco deben hacerlo. Esto
es porque los átomos de que está compuesta son la condensación de la
sustancia de que están hechos los pensamientos malignos de la humanidad
de este mundo y sentimientos del pasado.
Los animales no existían en
este planeta durante las primeras dos Épocas Doradas. Empezaron a
aparecer después de que la humanidad generó la discordia que siguió a
estos dos períodos. La Primera Creación descripta en el Génesis hace
referencia a estas dos Épocas Doradas y las describió como “Muy
buenas”. Después surgió la niebla, y la llamada “caída del hombre”
apareció por la atención del intelecto que se enfocó hacia los apetitos
del cuerpo, a través del sentimiento.
Así fue que la mente externa
se enajenó más y más en el mundo de las cosas y por lo tanto olvidó la
Fuente y el Poder de la Morada de su Ser, que es la “Magna Presencia YO
SOY”. El Plan Completo, o Modo Divino de Vida se perdió y más y más
discordia ha continuado introduciéndose en los sentimientos de la
humanidad desde entonces.
En tanto los seres humanos
insistan en matar animales, nunca serán capaces de romper los hábitos
viciados en sus sentimientos por los cuales se hayan encadenados, pues
están constantemente destruyendo sus propios cuerpos y dejando fuera
los más delicados impulsos mentales. El Amor de la humanidad hacia los
animales domésticos está elevando y purificando algo de esto –
creaciones pasadas – y liberando esa corriente de Vida hacia una más
armoniosa fase de la existencia. Según la humanidad vaya haciéndose más
armoniosa y pura, los animales desaparecerán de la Tierra; hasta la
hierba mala y todo lo que marchita a las plantas será removido y la
Tierra retornará otra vez a su Prístina Pureza, descrita como el Jardín
del Edén, o sea la obediencia a la Divina Sabiduría.
El gran daño en comer carne es
que la carne del animal registra los sentimientos de temor que
experimenta cuando se le va a matar. El animal tiene un cuerpo
emocional y la vibración del miedo registrado previamente al momento de
la muerte, califica la carne y esa propiedad es absorbida por el
cuerpo emocional del humano que la come. También causa que cierta
sustancia se condense en el cerebro y nuble el intelecto, impidiendo que
impulsos más delicados fluyan de él, provenientes de la “Magna
Presencia YO SOY”.
Los Maestros Ascendidos no
interfieren en lo concerniente a esta sustancia debido a que el
individuo hace estas cosas por su propia voluntad. El miedo, en sus
muchas sutiles fases, es el sentimiento predominante entre la humanidad
de hoy y es la puerta abierta a través de la cual la fuerza siniestra
mantiene el control de la personalidad y efectúa su trabajo
destructivo. Enseñar que es necesario comer carne para tener fuerza, es
malo y una mentira, pues el elefante, una de las más potentes criaturas
en la Tierra, es un animal que no come carne.
La idea de que los sueros de
animales pueden producir salud y perfección o protección contra la
enfermedad en el cuerpo limpio de un niño o un adulto, es otra
actividad que realiza de manera consciente la fuerza siniestra de este
mundo. Es solamente por la terquedad persistente en los apetitos de los
sentidos que la raza continúa usando su maravillosa capacidad mental y
la Energía Pura de la “Magna Presencia YO SOY”, para crear más y más
destrucción.
Cuando los seres humanos
dediquen el mismo tiempo y energía estudiando la Perfección y los
Maravillosos Milagros de la Creación que vemos por doquier, como lo
hacen ahora gratificando los apetitos físicos y antojos del yo
personal, ellos también producirán los mismos milagros que los Maestros
Ascendidos pueden hacer. Sin embargo, antes de que pasen 50 años, la
humanidad verá el hábito de comer carne, como ahora ve el canibalismo.
Hay muchas cosas que dejan una
sustancia en el cerebro que deben ser purificadas, si es que la
Completa Perfección de la “Magna Presencia YO SOY” va a ser liberada a
través de la conciencia personal. Estas cosas son, en su orden de
importancia: narcóticos, alcohol, carne, tabaco, exceso de azúcar, sal y
café.
Ahora llegamos al remedio para
estas cosas, ya que nunca llevaré su atención a un estado de
imperfección sin que les enseñe el Modo de trascenderlo y reemplazarlo
por la Perfección, traído de manera armoniosa. Deseo que se den cuenta
siempre que cualquier cosa que se necesita cambiar en la experiencia
física, si ustedes acuden a su “Magna Presencia YO SOY” en acción, con
su mente y cuerpo, se obtendrá resultado sin sufrir discordancia de
ninguna clase.
El Camino de la Perfección,
que es la Actividad de la “Presencia YOO SOY”, nunca pide al yo
personal nada sino la liberación de sus cadenas, su discordancia, sus
limitaciones y sus sufrimientos, y este cambio siempre es realizado
armoniosamente y por el Amor Divino.
El modo de purificar el
cerebro y la estructura del cuerpo, si la personalidad ha estado
suministrando estas substancias al cuerpo físico en el pasado, es
llamar a su “Magna Presencia YO SOY” para usar, a través de la mente y
el cuerpo, la Llama Violeta Consumidora, utilizando la siguiente
afirmación:
“MAGNA PRESENCIA YO SOY”, ARDE
A TRAVES DE MI TU LLAMA CONSUMIDORA DE AMOR DIVINO. RETIRA ESTE DESEO
DE MI, ANIQUILA SU CAUSA Y EFECTO, PASADO, PRESENTE Y FUTURO Y
REEMPLAZALO CON TU PLENITUD, TU PERFECTA SATISFACCIÓN Y MANTEN TU
COMPLETO DOMINIO AQUÍ PARA SIEMPRE”.
Esta misma afirmación puede
usarse para otra cosa, con el mismo milagroso y permanente logro.
Después, tomen un momento, por lo menos tres veces al día,
visualizándose parados dentro de un pilar de Llama Violeta girando
desde los pies hasta más allá de la cabeza y extendiéndose por lo menos
tres pies a cada lado del cuerpo. Mantengan esta visualización por el
tiempo que les resulte cómodo y sientan la Llama, que es el Poder
Purificador del Amor Divino, penetrar en cada célula de su cuerpo. Esto
disuelve toda impureza y substancias innecesarias en las células de su
cuerpo, aclarando e iluminando la conciencia. Esto es Parte del
Conocimiento del Fuego Sagrado que sólo ha sido enseñado en los Retiros
de la Gran Hermandad Blanca, a través de las edades. Es el Modo en que
los Maestros Ascendidos purifican, curan y armonizan a la humanidad, y
a la Tierra misma. Es el Poder por el cual los llamados milagros son
realizados. No puede tener otro efecto, ya sea en el cerebro, cuerpo o
asuntos, que no sea de gran alivio, confort, paz y eterno bien.
Cuando me refiero a la
creación animal de este mundo, deseo que comprendan que las aves fueron
originalmente creadas por los Maestros Ascendidos como mensajeros para
uso de la humanidad. Lo destructivo que algunas veces expresan es
debido a la irradiación de discordancia de los humanos. Según se acerca
la Nueva Era, esta condición desaparecerá. La Naturaleza, y por esto
quiero decir la vida vegetal y mineral de Esta Tierra, es creada y
traída a la manifestación por los Grandes Maestros Cósmicos que diseñan
y dirigen la Creación de un planeta a Niveles Cósmicos.
La Naturaleza, por ella misma,
es siempre pura y si la humanidad no impusiera su discordancia e
impureza en la atmósfera en que la vida vegetal se desarrolla, no
habría hierbas o plantas venenosas en existencia. Hubo un tiempo en
Esta Tierra cuando todo en la Naturaleza afectaba las mentes y cuerpos
de los seres humanos en forma armoniosa.
Dentro de la Naturaleza hay
una Actividad Eterna que es Purificadora y Protectora en sí misma y que
tolera, solamente por un tiempo, el genio destructor del hombre. Los
cataclismos son su método de defensa hacia lo que el hombre le ha
impuesto hace miles de años. De esta manera, Vida tras Vida el hombre
continuamente encuentra su propia creación regresando a él, hasta que
construya su Universo de acuerdo al Patrón de la Divina Perfección, que
es la Verdadera Expresión de Su propia Divinidad.
Época tras época, la
Naturaleza está continuamente devolviendo al hombre, en cataclismos, su
propia iniquidad, y Ella es más fuerte que ningún oponente, porque
Ella es la Creación Directa Emanante de los Maestros Ascendidos. De
esta manera, la discordia del hombre le destruye, y la Naturaleza, en
su Prístina Pureza, sigue adelante expresando serenamente su
Inmortalidad. Noten las muchas civilizaciones que ha habido en Esta
Tierra y el hecho de que la Naturaleza ha borrado toda traza de las
obras del hombre en cada una, y sólo la tradición y los mitos quedan de
estas obras.
El hombre, si ha logrado
Sabiduría, que es el uso constructivo de todo conocimiento, puede tener
la cooperación perfecta de las Gigantescas Fuerzas de la Naturaleza y a
través de ellas hacer Inmortales sus obras. Debe ponerle alto a la
matanza de animales para alimento y el negocio de criarlos para eso.
Fuente : fuegovioleta.org